A pura garra, con tremenda valentía, pero también con buen juego, Paraguay consiguió un espectacular empate ante Colombia, este martes en Barranquilla, para mantener su invicto en la era Gustavo Alfaro y dar otro tremendo paso hacia el Mundial Norteamérica 2026. El combinado guaraní llegó a estar abajo en el marcador y por dos goles, pero se sacudió y demostró que tiene un corazón gigante, invencible.
Una pelota parada nos devolvió la esperanza en el partido y una obra de arte de Julio Enciso determinó la paridad final de una selección que cada vez enamora más y más a todo un país.
Apenas comenzaba el partido, se vino el bajonazo ya que Luis Díaz rompió el cero a los 43 segundos y obligó a los guaraníes a tener que cambiar absolutamente toda la estrategia inicial.
Upéi katu los muchachos de Gustavo Alfaro recibieron otro durísimo castigo; Jhon Durán marcó el segundo cafetero en el minuto 13 coronando un contragolpe de manual.
Acá aparece la garra guaraní
La Abirroja le puso garra y corazón cuando Diego Gómez le puso terciopelo a su botín y envió un centro más precioso que doble aguinaldo que se convirtió en el descuento con el cabezazo goleador de Junior Alonso, quien apareció suelto en el segundo palo. Esto justo antes del entretiempo.
Así se mostró Paraguay en el inicio del segundo tiempo, como siguiendo el guión con el que se terminó la primera parte. Quizás empujado por la necesidad, pero especialmente por la vergüenza deportiva y la inmensa valentía de sus jugadores, la Albirroja empujó hasta llegar a la paridad.
En el minuto 63, Julio la “Joya” Enciso recibió un balón y luego de dejar rivales por el camino colocó el balón en uno de los ángulos de Camilo Vargas, cuya estirada fue solamente para la foto o para magnificar la postal. Tremenda anotación de Enciso quien firmó quizás el mejor gol de las Eliminatorias Sudamericanas camino al Mundial Norteamérica 2026.
