¿Cómo reconocer los síntomas de un infarto? Una mujer de EE UU contó su experiencia en un video publicado en TikTok. A la edad de 46 años, sufrió un infarto de miocardio, que vino precedido de algunas señales de alarma, como náuseas, dolor en un hombro y, el mismo día, una sensación de opresión en el pecho.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) refiere que la mayoría de las enfermedades cardiovasculares pueden prevenirse si se tratan los factores de riesgo y se detecta la sintomatología. A continuación, se presentan los síntomas de un ataque al corazón y algunas recomendaciones del Instituto Superior de Sanidad (ISS).
¿Cómo saber si me está dando un infarto de miocardio?
El infarto de miocardio, comúnmente llamado ataque al corazón, se produce cuando el flujo de sangre a una parte del órgano se detiene repentinamente. Esto provoca una falta de suministro de oxígeno al músculo cardíaco y puede causar diversos grados de daño. Algunos de los síntomas son:
- Dolor torácico
- Opresión en el pecho
- Dolor o molestias en la mandíbula, hombro izquierdo o brazo
- Mareos
- Náuseas
- Vómitos
- Tos
- Sudor frío
La OMS detalla que las mujeres son más propensas que los hombres a experimentar dificultad para respirar, náuseas, vómitos y dolor en la espalda o la mandíbula. «Las personas que experimenten estos síntomas deben buscar atención médica inmediata», subraya la organización.
También es importante recordar que un infarto no siempre se manifiesta de la misma manera. En algunos casos, el dolor torácico puede ser muy fuerte, pero en otros puede ser leve o estar ausente. El conjunto de molestias o síntomas ayuda a comprender si se trata efectivamente de un infarto. En tal caso, la asistencia de una ambulancia es necesaria. Mientras se espera, es importante que la persona descanse para minimizar el esfuerzo del corazón.
¿Qué hacer para evitar un infarto de miocardio?
Las arterias coronarias son las responsables del riego sanguíneo. Las alteraciones en las mismas son la principal causa del infarto. Lo que entendemos por «alteraciones» son las reducciones de la anchura del lumen interno de estas arterias debido a la presencia de placas ateroscleróticas, de las cuales pueden desprenderse coágulos que, a su vez, pueden provocar la interrupción total del flujo sanguíneo.
Aunque la Fundación Española del Corazón resalta la predisposición genética como un factor importante en un posible infarto de miocardio, existen también factores ambientales y de estilo de vida. Los factores de riesgo relacionados con este último, y por tanto modificables, son: el tabaquismo, el consumo de alcohol, el sedentarismo, una dieta rica en grasas saturadas, colesterol, sal y azúcar.
Otros factores de riesgo son la edad y el sexo. Según el ISS de Italia, el infarto de miocardio es frecuente en las mujeres con menopausia, y la frecuencia aumenta progresivamente hasta superar la de los hombres. Tener familiares de primer grado que hayan padecido una enfermedad cardiovascular a una edad temprana, menos de 55 años, también puede ser un factor de riesgo.
Artículo publicado originalmente en WIRED Italia. Adaptado por Alondra Flores.