Un informe de la Contraloría General de la República (CGR) reportó varias presuntas irregularidades en la administración del intendente de Villarrica, Magín Benítez (PLRA), destacando una transferencia de casi G. 400 millones a organizaciones sin fines de lucro sin exigir la rendición de cuentas. Esta es solo una de las 32 observaciones a la gestión municipal del ejercicio fiscal 2022.
El reporte de la CGR revela que la Municipalidad de Villarrica destinó G. 396.935.000 en concepto de Aportes a Entidades Educativas e Instituciones sin fines de lucro, sin los controles adecuados. Según el informe, no se solicitaron documentos respaldatorios, presupuestos mínimos, planillas de comparación de ofertas ni el formulario de rendición de cuentas visado por la Contraloría.
Este hallazgo, incluido en la Observación N° 22 del informe, señala una falta de fiscalización sobre el uso del dinero público, incumpliendo normativas de transparencia y control administrativo.
El informe oficial de la CGR señala: “La Administración Municipal transfirió en el ejercicio fiscal 2022 un total de G. 396.935.000 en el OG (Objeto de Gastos) 842 ‘Aportes a Entidades Educativas e Instituciones sin fines de lucro’, sin realizar el control adecuado sobre los legajos de rendiciones de cuentas de los beneficiarios, considerando que carecían de la cantidad mínima de presupuestos requeridos, planilla de comparación de ofertas y el Formulario B-01-01-A ‘Rendición de Cuentas’ visado ante la CGR”.
El intendente Magín Benítez argumentó que la rendición de cuentas es responsabilidad de los beneficiarios y no de la institución a su cargo. Sin embargo, la Contraloría afirma que la administración municipal debe velar por la correcta utilización de los fondos antes de efectuar nuevas transferencias.
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El organismo de control exige a la Municipalidad que los beneficiarios presenten sus planillas de rendición de cuentas con la firma de un contador y con el sello de recepción en la Contraloría General de la República. Asimismo, instó a la implementación de mecanismos de supervisión más rigurosos para evitar futuras irregularidades.
Otro punto que no fue observado por la CGR, pero que resalta en el informe, es el destino de los fondos transferidos. Del total desembolsado en 2022 a entidades sin fines de lucro, el 96% fue utilizado para festivales, carnavales y decoraciones navideñas, mientras que solo el 4% se destinó a sectores esenciales como salud y bomberos.
Se transfirió G. 100 millones para apoyo cultural al Festival de la Raza, G. 87 millones para la reparación de toldos y vallas perimetrales que se usan en actos culturales o festivos, G. 18 millones para eventos patrios y fiestas de San Juan, y un total de G. 175 millones para la fabricación y montaje de estructuras decorativas con temática navideña. En comparación, solo se transfirió G. 11 millones para el mantenimiento del local y vehículos de los bomberos voluntarios, y G. 5 millones para el mantenimiento de un vehículo del Consejo Local de Salud.

Esta distribución del presupuesto municipal fue criticada por varias autoridades, por las prioridades en la asignación de recursos y el impacto real de estas inversiones. Sobre esto, el intendente se limitó a decir que los cuestionamientos a su administración son ataques con tinte político, dirigidos a manchar la imagen del municipio.
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Además de la falta de control en las transferencias a ONG, el informe de la CGR identificó otras supuestas irregularidades en la gestión municipal de Villarrica. Entre ellas, se mencionan adjudicaciones por un total de G. 3.760 millones en contrataciones sin la debida transparencia y pagos sin respaldo documental.