El presidente de la Cámara de Diputados, el cartista Raúl Latorre dijo que los graves indicios de presunto negociado con la compra de pupitres por parte de Itaipú Binacional, es un “ataque al buque insignia del futuro del movimiento Honor Colorado”, el vicepresidente de la República, Pedro Alliana, salpicado por el escándalo. Evadió referirse a la estocada a la industria nacional, que fue relegada para favorecer a un empresario chino de buenos nexos con el cartismo.
En la Cámara de Diputados amanecieron hoy muestras de los pupitres chinos comprados por Itaipú de la mano del cartismo, intentando justificar la cada vez más turbia adjudicación por G. 248.713 millones (unos US$ 32 millones) a la empresa Kamamya, del empresario chino, Long Jiang, cuyos aviones eran usados en campaña a discreción por el vicepresidente de la República, Pedro Alliana. Latorre se refirió al caso, que incluso ya fue denunciado penalmente.
“Desde mi punto de vista entiendo esta situación como un ataque directo y político al buque insignia del futuro del movimiento Honor Colorado que es Pedro ‘Mangui’ Alliana y lo digo con claridad. Yo creo que esto es parte del juego de la política”, afirmó Latorre, pasando por alto los graves indicios de presunto direccionamiento de la licitación en detrimento de la industria nacional.
Latorre, que ayer nada más se reunió con el embajador de la República de China (Taiwan) en nuestro país, José Chih-Cheng Han, alabó la “calidad” de los mobiliarios de China Continental, con quién Paraguay supuestamente no tiene relaciones comerciales en apoyo a Taiwán, en una actitud cuanto menos hipócrita.
Alegó que supuestamente hicieron prevalecer el “interés general del niño” para apurar la adjudicación de los mobiliarios chinos. “Por el interés del niño y mejorar las condiciones en la educación escolar básica está la cuestión de los pupitres y la pregunta es, ¿van a ser útiles? Yo estoy convencido que sí, son de calidad, creo que eso también está claro. Entonces, desde mi lógica, ¿cuál es la interpretación que le doy? Yo lo interpreto como un ataque político hacia alguna insignia del futuro del movimiento Honor Colorado”, afirmó.
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Evitó hablar del presunto direccionamiento
Ante ello se le señaló que la industria nacional era capaz de la misma o mejor calidad, pero justamente se los dejó fuera por un presunto direccionamiento, detalles de los cuales Latorre evitó hablar.
“Fue una licitación. En base a la información que tengo fue asignado como ganador del proceso licitatorio el mejor precio, pero para las cuestiones técnicas inherentes al proceso, creo que es más es más conveniente y oportuno hacer este tipo de consulta a los técnicos que la realizaron”, se excusó.
El presidente de Diputados, por ejemplo, se negó a responder cómo la empresa adjudicada llamativamente compró un lote grande antes de que incluso se haga el llamado, el cual se ajustó específicamente a su producto y que no se permitió a la industria nacional a siquiera plantear alternativas y ajustarse a las exigencias de Itaipú “a medida” de la adjudicada.
