La actriz y gestora cultural paraguaya Ana Ivanova, quien falleció ayer a los 51 años, fue despedida esta mañana entre largos aplausos y sentidas muestras de afecto en el Cementerio de la Recoleta. La poesía y la música también se hicieron presentes para brindar el último adiós a la artista, quien fue una de las protagonistas de la premiada película “Las Herederas”.
En medio de aplausos, el féretro que transportaba los restos de Ana Ivanova ingresó por el portón Nro. 7 del Cementerio de la Recoleta. Familiares y amigos, entre ellos varios actores y directores de teatro, productores, cineastas, artistas visuales se hicieron presentes para despedir a la artista, quien falleció ayer tras haber permanecido hospitalizada por casi un mes en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram).
Ya frente al panteón recordaron el legado de Ana Ivanova y de lo mucho que “batalló por la comunidad cultural”, desde “la trinchera más difícil que es las artes escénicas”. También fue leído un texto enviado, desde Argentina, por un amigo llamado Iván. En el mismo se destacaba “la voz potente y la risa enorme” que la caracterizaban. “Ella fue los flashes, las luces y sombras. Electrizante, magnética, esplendorosa”, añadió.
“¡Ana, te atreviste siempre y ese es un gran culto que pocos profesan!”, expresó emocionada la actriz Ana Brun. La actriz hizo alusión a los versos de “Loca”, de Manuel Ortiz Guerrero, que Ivanova le recitó en una de las escenas más emblemáticas de la película “Las Herederas”, de Marcelo Martinessi.
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El tenor José Mongelós interpretó a capela “Alma vibrante” y también se leyeron algunas palabras que le dedicó el escritor y dramaturgo Moncho Azuaga. Los aplausos se repitieron constantemente y se extendieron por varios minutos, como esa ovación final que recibe el actor desde el proscenio hasta lentamente hacer mutis por el foro.
Los familiares de Ana Ivanova, entre ellos su madre, agradecieron a los amigos por este homenaje. “Esta es la cosecha de Ana”, expresaron.
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Una actriz “insolente” y “disciplinada”
“Maravillosa. Ella era muy atrevida, era muy valiente, muy insolente pero era ella. Y yo soy como ella, así que nos entendíamos muy bien”, expresó Ana Brun al ser consultada acerca de cómo era trabajar con Ivanova.
Margarita Irún, quien también protagonizó “Las Herederas”, recordó que si bien en la película no trabajaron mucho juntas, sí compartieron el escenario y le tocó dirigirla en “Voces de amor y lucha”. Compartió lo expresado por Brun y agregó que Ivanova hizo todo en su vida con cierto apuro.
“Ella era disciplinada, en medio de su indisciplina. Yo le decía ‘Ana, vamos a repetir’ y ella decía ‘¿Y en qué estuve mal’. ‘Y hay algo que tiene que mejorar’, le decía yo”, comentó la actriz. La recordó además como un espíritu “libre cual la brisa”.
Destacó que no solo la figura de Ana era imponente, sino que era “un ser humano hermoso”. “Ella dio mucho amor, tenía empatía, para todos tenía abierto el corazón. Así era ella”, añadió Irún y remarcó que Ivanova permanecerá “en el corazón de todos y cada uno de nosotros”.
