Una euforia y energía inusual se vivió anoche en el SND Arena, quizás porque entre el público había gente de todas las edades. Familias enteras acudieron a ver al colombiano Camilo quien, con sus rítmicas canciones y sus letras con un toque de inocencia, logra conquistar a varias generaciones.
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El artista también exhibe una gran soltura en el escenario, conversa con el público y no teme conectar con sus emociones. La canción “El Niágara en bicicleta” de Juan Luis Guerra fue la antesala al vídeo de inicio del show, representando unas cortinas metálicas que al levantarse dejan ver las nubes y luego la silueta de Camilo.
Flameando una bandera con el símbolo de La Tribu, que es como llama a sus seguidores, Camilo se hizo presente en escena acompañado por siete músicos. La bachata “BEBÉ” abrió este viaje musical, que se extendió por casi dos horas sin parar.
“Aeropuerto” fue acompañada por el público con las palmas, para luego encender más a la gente con la rítmica “KESI”. “Buenas noches Asunción, Buenas noches Tribu. Esta noche Paraguay es nuestro lugar favorito”, saludó el cantante, vestido con una camisilla blanca, unos pantalones holgados y su característico bigote.
“Una vida pasada” trajo el sabor de la salsa, para luego desatar otro momento de interacción entre Camilo y la gente, con el cantante mirando absorto a la platea que lo aclamaba. “Lo importante es que la tribu se juntó y cuando la tribu se junta ese es nuestro lugar feliz”, expresó.
“No se vale” siguió con un gran destaque a la trompeta y el trombón, para luego dar paso a “Pegao”, que incorpora un toque de cumbia villera. “Contigo voy a muerte”, “Tatoo” y “Desconocidos” aparecieron enganchados ofreciendo un momento a puro baile, llevando al público más hacia el reguetón.
Tomando tereré y contando una historia acerca de cómo su tecladista Nico González extrañaba a su ex que lo llamaba “yuyito”, Camilo hizo alusión al mbeju y luego dio paso a “Gordo”.
Con la guitarra en mano, el artista colombiano interpretó las baladas “Corazón de hojalata” y “El mismo aire”. Más adelante llegó el “Autodiagnóstico”, donde Camilo intercambió la guitarra por un solo de harmónica.
En “Millones”, Camilo pegó un salto hacia el nivel superior del escenario para terminar la canción tocando las congas. Luego llegó el turno de su gran éxito “Tutu”, con el público coreando a todo pulmón, y bajando al frente del escenario para cantar con la gente.
Con su tereré nuevamente a mano, Camilo ofreció set acústico y agradeció al público por una noche inolvidable. “La mitad” salió con dedicatoria a su mamá, quien al igual que su papá estuvieron sentados entre el público, mirándolo así como cuando interpretaba sus primeras canciones en la sala de su casa.
A esa su pequeña tribu, que completa su hermana, fue dedicada “Querida yo”, el reciente éxito que grabó junto a la argentina Yami Safdie. A esto le siguió la “Ropa cara”, que marcó el regreso nuevamente de los músicos al escenario a la mitad de la canción.
Canciones a dúo con Evaluna
Tras hacer bailar al público con la alegre “Mi lugar favorito”, Camilo reflexionó sobre la celebración del amor que hace en sus canciones. “Amar es nuestra revolución”, expresó y luego presentó a su esposa Evaluna Montaner, que fue recibida eufóricamente por la gente.
Juntos interpretaron varias canciones como “PLIS”, “Por primera vez”, “Macchu Picchu”, en medio de mucha complicidad entre ambos. Este momento fue coronado con la movida “Por primera vez”, que incluyó un momento a capela con el público coreando y acompañando con las palmas.
Camilo recordó el momento cuando se casó con Evaluna y tenía que pronunciar sus votos, pero no paraba de llorar emocionado. Fue así que interpretó “La boda”, una canción que empieza con un toque de bossa nova, pero luego evoluciona hacia el chachachá.
Ya sobre el cierre llegó la alegre “Vida de rico”, con papelitos y globos gigantes de colores flotando entre el público, y que Camilo culminó ya desde fuera del escenario con las imágenes en vivo siendo proyectadas en las pantallas.
Pero, el final del show estuvo marcado por el “Cumpleaños feliz” para el que Camilo regresó al escenario, acompañado por sus músicos, sus padres y Evaluna. El público cantó al artista minutos antes de la llegada de su cumpleaños 31, en medio de mucha emoción.
Iván Zavala y un cálido recibimiento
La apertura del show estuvo a cargo de Iván Zavala, quien acompañado por Karim Manzur en la guitarra, interpretó canciones como la alegre “Universo” y las baladas “Imposible” y “Te regalo”. El público cantó y aplaudió al artista pidiendo otra, a lo que Zavala respondió presentando “Amor pasajero”, una canción que será parte de su nuevo álbum.
