El Espacio Infantil está diseñado para fomentar el aprendizaje a través del juego, brindando información sobre conceptos científicos e instrucciones para interactuar con los experimentos. Como organización sin fines de lucro, Universum ofrece espacios accesibles de esparcimiento, con el objetivo de promover la sustentabilidad y la salud. Sus exposiciones están dirigidas a toda la comunidad, con un enfoque especial en los sectores más desatendidos.
“Fueron dos años y medio de trabajo, desde cabildear con aliados estratégicos hasta consolidar un ecosistema de 29 colaboradores. Partimos de cero: solo teníamos muchas ideas y ganas, pero nada más. Hoy, ese espacio de juego libre es una realidad, un lugar donde la ciencia no se enseña ni se muestra, sino que se descubre a través de la interacción”, explica la directora del museo.
Desde la primera infancia, los niños y niñas hacen preguntas, experimentan, fallan y aprenden, un proceso que refleja el pensamiento científico intuitivo. Este espacio busca fortalecer esta conexión natural con la ciencia, permitiendo que los niños exploren, pregunten y descubran a través del juego. Con una museografía especializada, el espacio promueve la idea de que no se necesita ser un experto para fomentar la curiosidad científica.
“Cuando estábamos a punto de cortar el listón, llegaron autoridades importantes: el doctor Lomelí, rector de la UNAM; el doctor Manuel Suárez, director general de Divulgación de la Ciencia; la doctora Soledad Funes, coordinadora de ciencia en la UNAM. Y cuando mencionaron mi nombre, el equipo, los niños y los aliados estallaron en aplausos y gritos. Se me cerró la garganta de emoción. Habían visto cuánto luchamos por este espacio. Incluso algunos aliados apostaban que no lo lograríamos en el tiempo previsto porque parecía un sueño de Quijote, un desafío enorme”, dice María Emilia Beyer a esta revista.
Este proyecto rompió esquemas: es una colaboración público-privada en un entorno donde lo privado suele tener poca cabida. “Pero la pandemia nos enseñó que las reglas de antes ya no aplicaban. No íbamos a salir solos”, explica la directora. “Después de la inauguración, cuando nos quedamos solas las cuatro aliadas, nos abrazamos sin poder creerlo. Habíamos corrido tanto, luchado tanto, que todavía nos costaba aterrizarlo. Si tuviera que describir cómo me siento, diría que en mi tiempo en Universum he hecho muchas cosas: exposiciones sobre color, dinosaurios, ciencia. Pero este espacio infantil es diferente. Aquí hay un legado filosófico: la apuesta por socializar a través del juego, por generar bienestar. Durante el encierro, leí sobre cómo los niños estaban desarrollando ansiedad y cuadros depresivos a los cinco años. Y desde mi trinchera, sabía que podía hacer algo. Esta pasión, esta emoción, es lo que nos movió. Y sé que este será mi legado”.
Un espacio diseñado para explorar y aprender
El nuevo Espacio Infantil ofrece áreas interactivas que van desde el autoconocimiento emocional hasta la exploración de las diversas dimensiones de la vida. Entre sus principales atracciones se encuentran: Un jardín de exploración, con juegos de burbujas y un huerto interactivo que introduce a los niños al mundo de las semillas, la seguridad alimentaria y la sustentabilidad. La primera biblioteca especializada en ciencia para la primera infancia en México, con más de 500 títulos que promueven el pensamiento creativo. Un espacio maker donde los niños pueden experimentar, crear y aprender de sus errores. Una zona destinada a bebés de 0 a 2 años, diseñada para gatear y explorar de forma libre. Un lactario y baños familiares, pensados para la comodidad de las familias.
Además, el espacio incorpora elementos de sustentabilidad y reciclaje, como mobiliario hecho de tetrapak reciclado, pisos flexibles de llantas recuperadas y tecnologías que optimizan el consumo de agua y energía.
Uno de los pilares del Espacio Infantil es fortalecer la conexión entre los niños y sus cuidadores. A través de actividades y museografía especializada, se busca inspirar a los adultos a fomentar la curiosidad científica desde casa. “No necesitamos ser expertos para motivar a los niños a hacer preguntas”, señala el equipo de Universum. “El juego y la experimentación son herramientas poderosas para el aprendizaje”.Universum, un museo de referencia en América Latina, busca que este proyecto tenga un impacto de largo alcance. El Espacio Infantil no solo beneficiará a las infancias actuales, sino que también servirá como modelo para otros museos en la región, promoviendo la integración del juego y el aprendizaje especializado para la primera infancia.
El Espacio Infantil ya está abierto al público y se espera que se convierta en un referente no solo para México, sino para toda América Latina, inspirando a más instituciones a integrar el aprendizaje científico y el juego en la vida de las infancias.
