La capital departamental recuperará, después de casi tres décadas, un símbolo emblemático de la época dorada ciudad, un reloj gigante en la rotonda situada en la intersección de la ruta PY02 y la avenida Carlos Antonio López. Los trabajos se iniciaron la semana pasada y la obra tiene un plazo de ejecución de 120 días.
La empresa adjudicada para la reconstrucción de la emblemática rotonda céntrica de Ciudad del Este, situada a 500 metros del Puente de la Amistad, es J&R Constructora, de Juan Ramón Doldán, con un contrato de G. 199.325.327.
La firma llevará a cabo el desarrollo del diseño ganador del Concurso Universitario de Arquitectura “Íconos de CDE”, realizado en 2021, cuyo primer puesto fue otorgado a la propuesta presentada por Ana Salazar, estudiante de Arquitectura en la UPE, y Ana Mallorquín, alumna de Ingeniería Civil de la UNA.
Según Richard Fernández, jefe de Fiscalización de la Municipalidad, los proyectos fueron evaluados por técnicos especializados, quienes analizaron su viabilidad y su impacto cultural.
Fernández explicó que actualmente se está ejecutando la excavación y preparando las armaduras del futuro monolito. En la fase inicial del proyecto, se llevaron a cabo los cálculos estructurales y el estudio de suelo.
La Rotonda Reloj fue un símbolo de la época dorada del comercio en el este del país durante la década del 80. En aquel entonces, la administración municipal instaló un imponente reloj en la cúspide de una torre de concreto, cuya estructura, dividida verticalmente en tres partes, representaba la unión de la Triple Frontera.
En 1997, como parte del proceso de rediseño urbanístico, el reloj –que en ese entonces ya no funcionaba– fue retirado de la torre y actualmente
se encuentra expuesto en el museo El Mensú, en el predio de la Municipalidad.
