El presidente de Paraguay, Santiago Peña, está de viaje por Israel, donde habilitó la embajada de Paraguay en Jerusalén. También se reunió con autoridades y ratificó los lazos con ese país de Medio Oriente.
En el marco de su viaje, el mandatario llegó hasta el Muro de los Lamentos y estuvo un momento de profundo respeto y reflexión. En su cabeza llevaba puesto un kipá, y posó su mano en el muro ante la atenta mirada de un rabino.
Este emblemático lugar, conocido también como el Kotel, es uno de los sitios más sagrados del judaísmo y del mundo espiritual, donde los judíos de todo el mundo se reúnen para orar y dejar sus plegarias entre sus antiguas piedras.
Paraguay e Israel no solo se unen en intereses mutuos de colaboración, sino que también estrechan los lazos simbólicos del espiritualismo, mostrando el respeto y la solidaridad del pueblo paraguayo con el pueblo judío. Sin dudas, la visita de Peña al lugar es un gesto lleno de significados históricos y espirituales.