El gobernador de Sebastopol, Mijaíl Razvozháev, redujo este domingo a cuatro el número de víctimas mortales del ataque ucraniano con misiles contra Sebastopol, en la anexionada península de Crimea, pero elevó a 151 la cifra de heridos.
“Murieron cuatro personas, incluyendo dos menores de edad, 151 personas solicitaron atención médica, 82 fueron hospitalizados”, escribió en Telegram.
El gobernador informó que había recorrido personalmente los hospitales en los que se encontraron los heridos para verificar que recibían la atención requerida.
Anteriormente se había informado de la muerte de cinco personas y de 124 heridos.
La ciudad portuaria de Sebastopol, base de la Flota rusa del Mar Negro, y la península de Crimea, ambas anexionadas por Rusia en 2014, declararon este lunes día de luto, y anunciaron que “se cancelarán todas las actividades masivas culturales, deportivas y recreativas”, y las banderas rusas bajarán a media asta en todas las instituciones estatales.
Este domingo las fuerzas ucranianas lanzaron cinco misiles contra Sebastopol, la principal base de la Flota rusa del Mar Negro, cuatro de los cuales fueron derribados por las defensas antiaéreas rusas, pero otro quinto se desvío de su rumbo y explotó sobre el litoral de la península, matando a tres civiles e hiriendo a otros 124.
El misil estalló sobre una playa en la que descansaba una gran cantidad de gente, aprovechando el calor estival del fin de semana.
El Ministerio de Defensa ruso identificó estos misiles como ATACMS, de fabricación estadounidense, y responsabilizó a Washington por suministrar este tipo de armamento a Ucrania.