En el distrito de Mbaracayú al menos 2 mil niños deben recibir hasta el lunes 23 de diciembre, los regalos que Papá Noel está entregando en las comunidades rurales y en el centro urbano. Esta vez, los colonos dieron su aporte para la compra de juguetes y también dulces, sumado al presupuesto municipal que cada año se destina para ese fin.
El recorrido comenzó el miércoles en las colonias Kirito, Fortuniña, Línea Sherer, Barro Negro, San Judas Tadeo y Cruce Mbaracayú. Ayer se hizo en la comunidad 28, Procopio, Colonia Guaraní, Guaraní del Este y Comunidad 47, pero los recorridos del “buen viejito” deben seguir en la fecha, utilizando las camionetas 4 x4 en vez del trineo, debido a los caminos no pavimentados y la lluvia caída en las últimas horas.
La intendenta Nancy Algarín explicó que es una actividad tradicional en el distrito y que los niños esperan la llegada de Papá Noel, que se hace con voluntarios y funcionarios de la municipalidad. De acuerdo a los antecedentes, Mbaracayú es pionera en este tipo de actividades por Navidad.
El recorrido en las comunidades más alejadas y donde existen niños cuyos padres no tienen condiciones de comprarles un presente por Navidad, es una de las prioridades en el distrito, ya que llevan un poco de alegría en medio de tantas necesidades.
Este viernes deben estar en Puerto Indio y la Colonia General Díaz, mientras que el lunes 23, el “buen viejito” recorrerá el centro urbano del distrito para entregar juguetes y dulces a los niños de la comunidad. También suelen entregar los regalos a las personas de la tercera edad.
EN SANTA FE DEL PARANÁ
El trineo de Papa Noel debe recorrer esta semana los asentamientos Santiago Martínez y otras comunidades rurales del distrito de Santa Fe del Paraná, para luego llegar al centro urbano y entregar los regalos a los niños de ese sector. Esta actividad se realiza hace 8 años en el municipio, con el aporte de colonos, comerciantes, los concejales y la intendenta Fátima Doerner.
“El buen viejito” suele recorrer en una camioneta y un alto parlante, para invitar a los más pequeños a concurrir hasta la municipalidad donde les entregan panchos, gaseosas y los anhelados juguetes. Para los niños, el solo hecho de ver a Papá Noel, ya es una señal que recibirán los anhelados presentes.