Justo un día antes de Navidad, los científicos habrán obtenido el vistazo más cercano al Sol en la historia. El 24 de diciembre, la sonda solar Parker de la NASA completará su acercamiento número 22 al astro y, con ello, tendrá su primera aproximación cercana. Tras varios años de órbita, la distancia entre el instrumento y el Sol se habrá reducido al máximo, aproximadamente a 6,200,000 kilómetros, justo en su “patio trasero”, a escala planetaria.
La sonda solar Parker despegó en agosto de 2018 y logró su primer acercamiento al Sol en octubre del mismo año. Su objetivo principal es estudiar la corona solar, la capa visible de la estrella que produce los principales fenómenos solares que afectan a la Tierra, como las eyecciones de masa coronal y las llamaradas solares. La sonda no gira alrededor del Sol como cualquier otro planeta. En su lugar, mantiene una órbita elíptica, similar a la de un cometa, que va desde Venus hasta la estrella.
Cuando llega a Venus durante sus recorridos, la Parker realiza una maniobra de asistencia gravitatoria que la obliga a dar la vuelta y, cuando llega al Sol, la sonda lo rodea, cada vez con menos distancia. De acuerdo con la NASA, el 24 de diciembre romperá su propio récord. También lleva el título del objeto más rápido fabricado, con una velocidad de 692,000 kilómetros por hora.
“Con cada órbita más cercana a nuestra estrella anfitriona, la sonda se enfrenta a un calor y una radiación brutales para proporcionar a la humanidad observaciones sin precedentes. Parker está recogiendo mediciones e imágenes para ampliar nuestros conocimientos sobre el origen y la evolución del viento solar, y contribuye decisivamente a la previsión de los cambios en el entorno espacial que afectan a la vida y la tecnología en la Tierra”, dice la NASA.
El acercamiento es un punto crítico para la misión, pero los científicos creen que la estructura de la sonda soportará la radiación. Todavía hay programados, al menos, dos acercamientos más para 2025. Las observaciones al Sol de estos últimos años serán fundamentales para la comprensión de la actividad de la estrella pues está en su punto máximo de actividad. Entender el viento solar ayudará a que los científicos protejan las telecomunicaciones de la Tierra y la tecnología del futuro.