Cada 28 de octubre, desde 2011, el mundo del judo celebra su día internacional en honor a Jigoro Kano, el fundador de esta disciplina, nacido en esta fecha en 1860. Este día, más allá de conmemorar su nacimiento, tiene como objetivo hermanar a los judokas de todas partes, invitando a quienes aún no conocen el judo a descubrir sus enseñanzas y valores.
El judo, que en japonés significa «camino de la suavidad,» es un arte marcial desarrollado a finales del siglo XIX por Kano. Se basa en técnicas de lanzamiento, derribos y control del adversario, sin el uso de golpes o armas, lo que lo convierte en un deporte marcial tanto físico como mental. Pero el verdadero corazón del judo reside en sus valores. Este deporte no solo busca mejorar la condición física, sino que promueve principios éticos que moldean a sus practicantes como personas integras.
VALORES QUE INSPIRA EL JUDO
La práctica del judo ayuda a perfeccionar cuerpo y mente, pero también fortalece el carácter. Los judokas son instruidos en una serie de principios morales que guían su vida dentro y fuera del tatami.
Algunos de los valores esenciales que Jigoro Kano integró en el judo son la cortesía, el coraje, sinceridad, el honor, la modestia, el respeto, autocontrol, la amistad, lealtad y gratitud.
UN ESTILO DE VIDA
En el Día Mundial del Judo, las escuelas y federaciones en todos los continentes organizan eventos, exhibiciones y actividades para dar a conocer esta disciplina a quienes no la practican, y para recordar a los judokas la importancia de los valores que deben cultivar en su día a día. A través del judo, miles de personas han encontrado un camino de aprendizaje, humildad y superación que les acompaña en todas las etapas de su vida.
Así, el Día Mundial del Judo no solo celebra una disciplina física, sino una filosofía de vida que aboga por el respeto mutuo, el autocontrol y la constante mejora personal. Como decía Jigoro Kano, el objetivo final del judo es «la prosperidad y el beneficio mutuo», un ideal que cada 28 de octubre resuena en los dojos y en los corazones de los judokas alrededor del mundo.