“El Real Madrid condena de manera rotunda cualquier tipo de comportamiento que implique racismo, xenofobia o violencia en el fútbol y en el deporte, y lamenta profundamente los insultos que unos pocos aficionados profirieron anoche en uno de los córneres del estadio”, reza el texto.

Asimismo, el club detalla que se ha abierto una investigación con la finalidad de localizar e identificar a los autores de estos “lamentables y deleznables insultos” con el fin de tomar las medidas disciplinarias y judiciales pertinentes.

Este 26 de octubre se disputó el clásico de LaLiga en la capital española. El FC Barcelona se impuso con contundencia en casa de su archienemigo con un marcador de 0-4, con dos goles de Robert Lewandowski, uno de Lamine Yamal y otro de Raphina.

Durante la celebración del tanto, Yamal fue objeto de insultos racistas, ya que aficionados del equipo contrario gritaron “¡puto negro!” y “¡puto moro!” al joven futbolista, que es español de origen marroquí-ecuatoguineano, recoge el diario Marca.