Íñigo Errejón dimitió este jueves de todos sus cargos. Publicó una carta en redes sociales en la que explicaba el desgaste que supone estar en primera línea política durante tanto tiempo, las contradicciones que había tenido que ir superando y las dinámicas tóxicas que había asumido. No dijo nada de las acusaciones anónimas de violencia machista que desde hacía días pendían sobre él. Sin embargo, a raíz de su dimisión, Sumar y Más Madrid han anunciado investigaciones internar, ha habido una denuncia de otra mujer y la policía está investigando el caso. A continuación, todas las claves sobre el caso Errejón:
El miércoles, la periodista Cristina Fallarás publicó en su cuenta de Instagram el testimonio de una mujer que, sin dar el nombre de Errejón, hablaba de un político “que vive en Madrid” y al cual tachaba de “maltratador psicológico” y “un verdadero monstruo“. “Te pide hacer prácticas humillantes y cuando te niegas te monta números”, continuaba. El nombre de Errejón no tardó en salir. Sobre todo, porque hacía unos meses también hubo otro testimonio en redes sociales de una mujer que denunció que Errejón le tocó el culo sin consentimiento durante un festival.
Al día siguiente, Errejón publicó su carta de dimisión en la red social X, anteriormente Twitter. “El ritmo y el modo de vida en la primera línea política, durante una década, ha desgastado mi salud física, a mi salud mental y a mi estructura afectiva y emocional”, explico. A esto, añadió que la política “genera una subjetividad tóxica que en el caso de los hombres el patriarcado multiplica, con compañeros y compañeras de trabajo, con compañeros y compañeras de organización, con relaciones afectivas e incluso con uno mismo”. Estas palabras podían entenderse como una justificación a las actitudes denunciadas, pero en ningún momento se refirió directamente a las acusaciones.
Tras la carta de dimisión, los testimonios en redes sociales han ido proliferando y varias excompañeras de Errejón han llegado a publicar mensajes dando a entender que se ha hecho justicia y que estas actitudes eran conocidas por su entorno. Además, tanto Sumar como Más Madrid han explicado que el miércoles abrieron sendas investigaciones a raíz de las informaciones publicadas por Fallarás. La propia Yolanda Díaz llamó a Errejón el jueves y este admitió que había tenido actitudes machistas. Lo mismo hizo ante la cúpula de Más Madrid. Después, Díaz aseguró que la dimisión del exportavoz fue gracia a esas investigaciones.
A lo largo de la tarde del jueves, Fallarás fue publicando más testimonios anónimos en su cuenta de Instagram. En la red social X, la actriz madrileña Elisa Mouliáa fue la primera en dar la cara públicamente. “Hola, yo soy víctima de acoso sexual por parte de Íñigo Errejón y quiero denunciarlo”, publicó en su cuenta. Durante la tarde, Mouliáa acudió a comisaría e interpuso una denuncia contra Errejón en la que asegura haber sido víctima de dos agresiones sexuales en la misma noche, con besos y tocamientos, a finales del mes de septiembre de 2021.
A las pocas horas de que se presentara la denuncia en comisaría, la policía ya comenzó las diligencias para investigar las acusaciones contra Errejón. Por el momento, la investigación consiste en preguntar a los testigos que estuvieron en la fiesta en la que supuestamente ocurrieron las agresión.