NACIONALES (realidad fatídica, por Redacción) La adolescente de 13 años perdió la vida por complicaciones producidas por el streptococcus pyogenes o estreptococo, una bacteria que puede causar enfermedades como faringitis, y aparecen 1 a 3 casos por cada 100.000 personas al año.

El director del Hospital Acosta Ñu, Dr. Héctor Castro, comentó que la adolescente, estudiante de un colegio en Capiatá, estuvo internada desde el 11 de octubre en terapia intensiva por un cuadro respiratorio que derivó en una infección invasiva.

Se trataba de un germen que ingresa a través de las vías respiratorias conocida como estreptococo, y afecta mayormente a la franja pediátrica.

“Es una bacteria que puede ocasionar infección en la garganta, que puede manifestarse incluso con una faringitis y con pus en la garganta. En algunas circunstancias extremadamente raras, hay datos de que pueden aparecer 1 a 3 casos por cada 100.000 personas al año”, expresó Castro en conversación con la radio 650 AM.

La bacteria ingresa al organismo a través de gotitas de saliva o por contacto directo con personas infectadas que propagan al hablar, toser, estornudar, e incluso puede transmitirse por contacto con objetos y superficies contaminadas.

Según Castro, la bacteria es muy sensible al antibiótico, sin embargo, cuando se produce una infección invasiva como ocurrió con la estudiante, el caso se deriva a cuidados intensivos porque no solo afecta la parte respiratoria, sino también, la respuesta inmunológica.

“La gran mayoría de los casos, con una consulta precoz, con un facultativo, y la indicación oportuna del antibiótico, esto se revierte en la salud completa. Es contagioso en ambientes cerrados muy cercanos”, agregó..

El director del Acosta Ñu recomendó medidas de higiene esenciales para la prevención como el lavado de manos frecuente, ventilación de ambientes, no compartir toallas, cubiertos y otros objetos personales.

En caso de presentar alguno de los síntomas evitar la automedicación y consultar al médico lo antes posible para tener un diagnóstico y tratamiento oportuno. Hasta el momento, no hay vacunas contra la bacteria.