Este fin de semana se definieron los ascensos a la Liga 1, la Primera División de Perú, y uno de los equipos que jugará en la máxima categoría es Deportivo Juan Pablo II College, un club que fue fundado en 2015 por el actual el presidente de la Federación Peruana de Fútbol y lleva el nombre del Papa polaco.
Con apenas nueve años de vida, Juan Pablo II de la ciudad de Chongoyape (a 800 kilómetros de Lima) se convirtió en uno de los flamantes ascendidos a la Primera del fútbol de Perú para 2025. Y su llegada a la élite del fútbol incaico no pasó inadvertida por lo que pasó este domingo en el partido ante Comerciantes y por quién es su dueño.
Juan Pablo -en honor al fallecido Sumo Pontífice de la Iglesia Católica- pasó de disputar una liga distrital a llegar a la élite del fútbol peruano en un abrir y cerrar de ojos. Producto de su buena participación en la Copa Perú 2023 (arribó a semis) accedió a la Liga 2 en este 2024. Favorecido por las exclusiones de Union Huaral y Juan Aurich (el equipo que jugó con River en la Copa Libertadores de 2015), terminó en la quinta posición de la Zona Norte y se metió en el grupo B de la Zona Campeonato. Finalizó en el primer puesto de esta última y accedió a semifinales contra Comerciantes, buscando el boleto a Primera.
Este equipo de Chongoyape no es uno más porque su propietario es Agustín Lozano, presidente de la Federación Peruana de Fútbol. No genera mucha empatía en algunos hinchas del fútbol peruano por ese motivo-vínculo. Entienden que ha sido favorecido o beneficiado a lo largo de estas dos últimas temporadas. A tal punto que, post ascenso, la página de Facebook de la institución colapsó por la cantidad de comentarios negativos de los usuarios.
En lo que al ascenso se refiere, en la ida, jugada el pasado miércoles, Comerciantes había ganado 1-0 de local. En la revancha de este domingo, Juan Pablo ganó 2-1 con polémica mediante por el claro offside en uno de los dos goles (el de Facundo Rodríguez). Igualados en el global, hubo penales, que tampoco pasaron por alto.
Primero, al arquero argentino Matías Vega (Renzo Alfani, Gustavo Collante y Marcelo Argüello son los otros del plantel) se lo vio con un libro en sus manos. Seguramente, allí tenía el machete con los datos de los pateadores adversarios.
Segundo, el pésimo penal pateado por el colombiano Kevin Lugo de Comerciantes. Prácticamente se la entregó a las manos al arquero local Vega. Finalmente, el dueño de casa se impuso por 4-3 mediante esta vía y llegó a la final, con el ascenso en el bolsillo (lo mismo para Alianza Universidad, su siguiente rival, tras eliminar a Santos). Definirán al campeón, pero ya con el objetivo cumplido para ambos.