Romina Taboada, embajadora del gobierno de Paraguay ante la Santa Sede, inició sus actividades y su misión y primeramente se reunió con el Papa Francisco y le presentó sus Cartas Credenciales, donde de paso, el Sumo Pontífice demostró su profundo cariño y respeto al pueblo paraguayo, especialmente hacia la mujer paraguaya.
“Le entregué como obsequio al Santo Padre una imagen de nuestro santo jesuita Roque González de Santacruz cuyo corazón incorrupto el Santo Padre recordó que estaba en la iglesia del Cristo Rey, con esa imagen pidió al Señor la bendición de todo el pueblo paraguayo con la mediación de San Roque”, afirmó la embajadora Taboada.
En otro momento resaltó que el Papa Francisco valoró el rol de la mujer paraguaya en la historia de nuestro país, el fortalecimiento de la cultura, la lengua y la fe, sobre todo en la época de la post guerra.
“Recordó con afecto y admiración a una paraguaya de nombre Ester de Careaga, quien cuando Bergoglio era seminarista fue su coordinadora en una empresa químico-farmacéutica, resalta el trato respetuoso que tenía con él, así como la gran persona que era y que siempre le comentaba mucho del Paraguay “afirmó la embajadora.
Posteriormente el Papa Francisco recordó su visita al Paraguay, destacando el amor y el calor humano con el que fue recibido. Según relata la embajadora Francisco valoró la bondad y la valentía del pueblo paraguayo.
“Me siento honrada en representar a nuestro querido país, a su gobierno y a la mujer paraguaya, tan valorada por el Papa. Tuve una conversación muy cercana y afectuosa. Vi a un Santo Padre con mucha energía, ánimo y fuerza… su sabiduría y carisma personal es sorprendente” , finalizó.