No paran las repercusiones en relación a los hermanos Méndendez, después del estreno de la serie de Netflix, que recrea la historia de ellos. El 20 de agosto de 1989, Lyle y Erik cometieron uno de los crímenes de mayor impacto público en la historia de los Estados Unidos.

Con solo 21 y 18 años asesinaron a sus padres, José y Kitty Menéndez (famoso productor de artistas), en su lujosa casa de Beverly Hills. En su defensa dijeron que hicieron porque eran abusados. En juicio no lo pudieron demostrar y fueron condenados a cadena perpetua.

La modelo Kim Kardashiam exige ahora la revisión del caso de ellos, después de visitarlos en la cárcel hace tres semanas. A través de un escrito para NBC News, dijo “es hora de que los hermanos Menéndez sean liberados”.

“Todos somos productos de nuestras experiencias. Ellos dan forma a quiénes fuimos, quiénes somos y quiénes seremos. Fisiológica y psicológicamente, el tiempo nos cambia, y dudo que alguien diga ser la misma persona que era a los 18 años”, dijo.

En el texto que ha publicado, Kardashian contó que pasó tiempo con Lyle y Erik y asegura que “no son monstruos”. “Son hombres amables, inteligentes y honestos. En prisión, ambos tienen un expediente disciplinario ejemplar”, siguió.

Dijo que 24 familiares, entre ellos los hermanos de sus padres, hacen el mismo pedido que ella, que los pongan en libertad.  Kim aclaró que  los asesinatos “no son excusables”, pero habló de que no se puede negar quiénes son hoy, a sus 50 años.

“El juicio y el castigo que recibieron estos hermanos fueron más propios de un asesino en serie que de dos individuos que soportaron años de abusos sexuales por parte de las mismas personas a las que querían y en las que confiaban”, dijo.

“No creo que pasar toda su vida natural encarcelados fuera el castigo adecuado para este complejo caso. Si este delito se hubiera cometido y juzgado hoy, creo que el resultado habría sido radicalmente distinto”, señaló.

“También creo firmemente que se les negó un segundo juicio justo y que la exclusión de pruebas cruciales de abuso negó a Erik y Lyle la oportunidad de presentar plenamente su caso, socavando aún más la justicia de su condena”, finalizó Kim, quien además de modelo y empresaria es abogada.