Siempre me apunto a un poco de acción retro de ciencia ficción. Donde Perfect Dark calmó mis ganas de Deus Ex con un toque de color durante el Xbox Games Showcase, Replaced hizo lo propio con la visión más tradicional del género que, aparte de The Ascent, no ha tenido demasiados trabajos notables en los últimos años. Curiosamente, acabo de mencionar tres juegos que son o fueron exclusivos de Xbox en algún momento. Sí, también tuvimos el digno Narita Boy y otros, pero para un género tan querido y fructífero, más aún después de Cyberpunk 2077 y el regreso de Blade Runner, esperaba y deseo más.
Irónicamente dado su título, Replaced ha sufrido hasta ahora una historia de desarrollo bastante distópica. Presentado en 2021 en medio de la pandemia, luego retrasado a 2022, 2023 y 2024 debido a la invasión rusa de Ucrania o a la necesidad de pulirlo más, nunca pareció “casi listo”. Hasta ahora.
En Los Ángeles y como parte de los Summer Game Fest Play Days (aunque organizado por Microsoft, no se acogió en el espacio propio de Xbox), me senté con el juego durante media hora, la demo dedicada dividida a su vez en tres partes: Prólogo, Estación y Combate.
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Curiosamente, el representante que me atendió me recomendó que jugara a la demo del revés, de abajo a arriba, para que, en primer lugar, me hiciera una buena idea de la mecánica de combate, luego una noción de la vertiente de aventura/RPG y, por último, si me apetecía, un muro de texto sobre el lore y la historia.
Disfruté de los tres, sobre todo gracias al enfoque estilizado y cuidadoso tanto de la ambientación como de los conceptos más frescos y los pequeños detalles, pero antes de que te cuente más, tengo que decir que el rendimiento aún no está a la altura. A veces resultaba entrecortado, en el mejor de los casos, tanto al pulsar los botones en combate (y no querrás fallar las indicaciones, te lo aseguro) como al caminar por el entorno para una exploración menos seria.
Ahora bien, se describe oficialmente como un “juego de plataformas de acción retrofuturista sci-fi en 2,5D”, pero a mí y por lo que jugué me pareció más una aventura de acción centrada en el combate rítmico y la exploración tipo RPG, ya que no vi ni rastro de plataformas durante el tiempo que pasé con el juego.
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¿Cómo funcionan los controles de Replaced?
El combate es divertido y refrescante en un sentido nostálgico, porque recuerda al estilo característico de Batman Arkham, pero desde una perspectiva vista lateral. Pulsa X para un ataque ligero, A para esquivar los embistes enemigos con un marcador rojo, Y para contrarrestar los golpes enemigos con un marcador amarillo, que aturdirá al rival. La energía aumenta con los ataques y contraataques exitosos, disminuye con las esquivas y la pasividad. Cuando estás a tope de energía, puedes lanzar un disparo a distancia con RT, así que tienes que tener mucho cuidado con el cuándo. ¿Y para qué sirve B? Bueno, muy pronto te enfrentarás a enemigos acorazados, que son inmunes a todos y cada uno de los ataques a menos que destruyas su blindaje corporal con un ataque pesado, pulsando ese botón. Incluso antes de eso empezarás a pulsar abajo en el D-Pad para curarte con un botiquín o medkit, cuyo número es limitado.
El esquema básico es fácil de aprender, pero el número de enemigos y el ritmo creciente de sus ataques lo hacen más difícil de dominar. Y satisfactorio. Poco a poco se convirtió en lo que parecía una danza demente de culto postapocalíptico ante un altar en llamas, con el espacio encogiendo dentro de los límites 2D de la pantalla, encadenando volteretas de esquiva con golpes y remates, todo cada vez más rápido y preciso.
Una buena introducción al sistema de combate con la sospecha, sin embargo, de que un par de veces no fue del todo culpa mía cuando fallé los comandos. Esta sensación se reforzó aún más al explorar la Estación, un entorno rojizo y desolado pero precioso a su manera, con varios niveles, interiores y mucha gente con la que hablar para conseguir misiones o fragmentos de historia.
“Una prueba atómica fracasada provocó la pérdida de miles de vidas estadounidenses en los últimos dos meses”.
REACH es nuestro hombre con alma de IA (¿pero qué es el Proyecto R.E.A.C.H?), que parece haber sido, ejem, Replaced, y se ven todos los clichés de la ciencia ficción de un vistazo: la megacorporación que gobierna ciudades y vidas, el tipo al que le falta una pierna y necesita una operación tecnológica, el artilugio tipo PDA para revisar tus misiones, recados y estado actuales (se llama Wingman y va con cintas de cassette, en el mejor guiño retrofuturista al Walkman), o Susan, la niña que se resiste a jugar contigo a menos que le consigas un rectificador, para luego, a su vez, conseguir los prismáticos que buscabas.
La escritura parece buena y acorde con el tono. El diálogo ramificado, con cada botón asignado a respuestas diferentes, añade otro toque aventurero. Hay muchos misterios y miserias que descubrir en Phoenix City, y me entusiasmará acompañar a REACH en esta misión tan personal siempre que el juego final mantenga la dinámica de juego variada, la ambientación interesante y, sobre todo, el aspecto técnico lo bastante sólido como para soportar esa belleza artística pixelada.