Shopping cart

Magazines cover a wide array subjects, including but not limited to fashion, lifestyle, health, politics, business, Entertainment, sports, science,

LA CLAVE

LA COLECCIÓN

82

TENDENCIAS (por Charly Friend) En esta oportunidad compartimos un relato que al principio puede tener un tinte erótico pero finalmente resulta ser un relato de terror que si quieren podemos pensar que deja una bonita reflexión.

Era una noche cálida y él estaba completamente borracho, tanto que cuando vio a aquella colegiala creyó que solo eran los efectos del alcohol. Se trataba de una rubiecita con un uniforme de escuela católica que incluía una falda tan corta que apenas se le podía dar ese nombre. Se preguntó qué carajo hacía en esa calle mugrienta y abandonada.

Pero más que nada pensaba en qué clase de ropa interior llevaría y en lo fácil que resultaría averiguarlo, pues, si seguía caminando en aquella dirección, pasaría por un callejón desolado en el que podría poseerla sin dificultad.

La siguió de cerca y ella no pareció advertir su presencia, logró percibir una dulce esencia de frutos y rosas en ella que lo incitó a continuar, cuando llegaron frente al callejón la tomó de la cintura y la introdujo en él, ella no pronunció palabra alguna ni pareció poner resistencia, era una provocadora y sabía que se lo había ganado por andar vestida de aquella forma, fue lo que él pensó.

Le puso la cara contra la pared mientras tocaba sus incipientes pechos, levantó su falda descubriendo que portaba pantaletas blancas y que tenía un buen trasero, no pudo evitar masajearlo y pellizcarlo.

Comenzó el ultraje, sintió un extraño frío cuando empezó a poseerla, pero no le importó hasta que escuchó un chasquido y sintió un agonizante dolor que lo hizo aullar como un perro, se separó de la rubia y miró hacia la parte inferior de su cuerpo viendo que su parte había sido cortado de tajo y en su lugar apenas quedaba un pulpejo rojizo que no paraba de sangrar, tras esa visión se desmayó…

Camila hizo presión nuevamente en la trampa que se había colocado liberando el miembro cercenado, lo miró despectivamente, era apenas mayor que un dedo, pero de cualquier forma serviría para ampliar su colección.

Autor: Fairuza Escritora y gracias para Elixir de miedo.

source

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *