Mediante el documento que los negociadores titularon “Entendimiento entre el Paraguay y el Brasil sobre directivas relacionadas con la energía de Itaipú binacional”, ya en su primer párrafo, los gobiernos de Santiago Peña y Luiz Inácio da Silva fijaron en US$ 19,28 el kWmes -US$ 2,57 más que la que rigió hasta diciembre de 2023 -, que estará en vigencia este año, el próximo y en el 2026.
La crítica identifica como primer obstáculo el monto que debe pagar la empresa estatal si decidiese contratar la mitad de la potencia disponible para contratación en la central binacional: US$ 1.404 milllones, un monto equivalente al total de su deuda actual.
Lea más: Paraguay pierde con el acuerdo Peña-Lula, advierten
“O bien -añaden- US$ 758 millones más por año que el costo del servicio de electricidad”. Subrayan que esta decisión, la de pagar US$ 19,28/kWmes, la ANDE pierde la oportunidad de pagar solo US$ 645,82 millones por año por el 50% de la potencia que le corresponde en Itaipú, “casi lo misma cantidad que la que ahora paga por el 20% (2.369 MW) de potencia”, la cantidad que contrata hoy.
Unite al canal de ABC en WhatsApp
Recuerdan, como contexto, que la potencia total disponible para contratación en la central binacional es de 12.135 MW (1 MW = 1000 kW) y, por consiguiente, 6067,5 MW pertenecen a nuestro país.
Conquista o derroche de un extraordinario costo de oportunidad
Esta demostración echa por tierra la versión oficial que caracteriza lo acordado por el Poder Ejecutivo como “una conquista histórica”, porque si se hubiera aceptado el costo actual de la entidad binacional, o sea US$ 8,87/kWmes, la ANDE hubiera podido adquirir la mitad de la potencia disponible casi por el mismo valor que actualmente eroga por el 20%, utilizar en su sistema interconectado todo lo que necesite y exportar el resto con precios de mercado.
Lea más: Exportación real del Paraguay no llega al 1% de la cedida en Itaipú L
Con US$ 19,28/KWmes, esa posibilidad se complica, o se desaprovecha, no solo por el monto de la factura que la ANDE recibirá cada mes, sino también por los precios que podrá ofrecer con ese costo, sin posibilidad alguna de alcanzar la competitividad.