El mes que viene vuelve la serie que ninguno de nosotros quería que nos gustara tras el desastroso final de Juego de Tronos, pero que acabó gustándonos de todos modos: La Casa del Dragón. Los fans de los libros de George R.R. Martin ya saben lo que se avecina, y el resto imaginamos que tendrá algunos elementos sangrientos, por no decir otra cosa.
Uno de los momentos más infames del libro tiene que ver con dos personajes, a los que conocemos como Sangre y Queso. No vamos a desvelar lo que hacen, pero espera niveles de horror propios de una boda roja. Olivia Cooke, que interpreta a Alicent Hightower, contó a EW lo que pudo sobre el momento.
“Yo solo diría: es Juego de Tronos, espera lo peor. Espera lo peor posible, y luego duplícalo. No sé qué más decir sin estropearlo mucho, pero es atroz”.
El cocreador de la serie, Ryan Condal, también habló de lo que podemos esperar de la 2ª temporada, diciendo que es “la marcha hacia la guerra. En realidad es una guerra fría, porque cada bando intenta ganarse el trono sin llegar a la guerra total con dragones. Lo hacemos mediante conspiraciones y puñaladas por la espalda y asesinatos y juegos de espías y todas las cosas que verías en un thriller clásico de James Bond sobre la Guerra Fría”.