Los delincuentes operaban en San Lorenzo, Villa Elisa y J. Augusto Saldívar, donde se realizaron allanamientos en simultáneo e incautaron gran cantidad de sim cards, muchas de estas ya utilizadas para el fraude. También se halló un cuaderno en el cual se detalla cada paso del operativo de manera minuciosa.
El comisario Diosnel Alarcón, jefe del Departamento de Delitos Informáticos de la Policía, manifestó que se logró desbaratar una banda que realizaba operativos fraudulentos en complicidad con empleados infieles de una firma de telefonía móvil que además contaban con tentáculos dentro de otra compañía, que eran los encargados de aprobar parte del procedimiento.
Dos mujeres y un hombre fueron detenidos en el mencionado operativo, todos mayores de edad que no llegan a los 40 años.
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Una de las mujeres detenidas tiene vínculo laboral con una empresa telefónica mientras que la otra trabaja de manera tercerizada y era la encargada de reactivar y desactivar la línea.
Ambas están a cargo de la Fiscalía y guardan prisión preventiva en la Comisaría de Mujeres, mientras que el hombre se encuentra en las dependencias del Departamento de Delitos Económicos de la Policía Nacional.
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Veinte denuncias serán cotejadas con este caso
Las evidencias incautadas en los tres allanamientos deberán ser cotejadas para saber si coinciden con las recientes 20 denuncias recibidas por la Policía Nacional y la Fiscalía.
“La modalidad de operación para la estafa coincide”, manifestó el comisario.
Empleados infieles
A criterio del jefe de Delitos Informáticos de la Policía Nacional, se trata de una organización robusta que involucra a empleados infieles que proveen información incluso a personas privadas de libertad.
Las llamadas ya no son desde Tacumbú
Manifestó que actualmente las llamadas para estafar ya casi no provienen de la Penitenciaría de Tacumbú, dado que se pudo “parchar” el problema; sin embargo, desde otras cárceles se registran este tipo de casos, como las de Concepción, San Pedro, Cereso, Pedro Juan Caballero y Ciudad del Este.
Si bien, las personas privadas de su libertad no pueden tener teléfono en las celdas, sigue existiendo mucha corrupción de funcionarios penitenciarios que proveen de comunicación a los presos.
Medidas de prevención
Lo principal es no proporcionar el pin transaccional; tampoco se debe guardarlo en el celular o tenerlo anotado. Se debe memorizarlo.
“Te dan mucha información para convencerte de que están llamando de la compañía telefónica, pero al final, sí o sí, necesitan el pin transaccional y eso no hay que proveer”, especificó.