El hombre fue ejecutado en una zona muy populosa, pero nadie vio nada. (Foto: Ilustración)
Andaba por la calle. Sus pasos se sucedían uno tras otro por la calle Parapití, a la altura de 39 proyectadas en Asunción. La zona es por demás populosa y siempre hay alguien presente. Justo cuando este joven de 24 años estaba en el lugar, la única persona que lo vio fue quien, irónicamente, estaba decidido a acabar con su vida. Y nadie vio nada…
La noche amparó al criminal quien, tras ejecutar a su víctima con tres certeros disparos en la cabeza, huyó del lugar sin dejar rastros ni testigos que puedan identificarlo.
El Crio. Walter Lobos, jefe de la Comisaría 21 de Asunción, informó que “los familiares manifestaron que él suele salir a cualquier hora, lastimosamente recibieron la información a la medianoche de que falleció por cuestiones que desconocen”.
La hermana de la víctima contó que el muchacho era adicto a las drogas, pero que desconocen que haya recibido algún tipo de amenaza. En la revisión del registro policial, el único antecedente detectado es el de violación del medio ambiente, no así, algún hecho vinculado a las drogas.