El Centro de Predicción de Clima Espacial de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) ha pronosticado una tormenta solar nivel G2 durante la tarde del 24 de julio. Las partículas cargadas fueron expulsadas de la superficie del Sol durante el 21 de julio y pronto interactuarán con el campo magnético de la Tierra, lo que dará como resultado auroras boreales.
La NOAA puntualiza que las auroras boreales o ‘luces del norte’ podrían ser visibles en estados del norte y de la franja intermedia de Estados Unidos. Las estimaciones locales prevén fenómenos visuales desde Nueva York hasta Idaho. Esta franja se encuentra considerablemente más al sur de lo usual. Una “luz del norte” generalmente se visualiza en el círculo ártico.
Una tormenta solar de nivel G2 se considera una de rango moderado. Para contextualizar, la tormenta de mayo que ocasionó decenas de auroras boreales en locaciones poco convencionales como México tuvo un nivel G4 o de rango severo. La actividad que se registrará en el campo magnético de la Tierra el 24 de julio no supone un riesgo para las comunicaciones, pero será lo suficientemente fuerte como para alterar las partículas de la ionosfera y crear los colores característicos de las auroras en el cielo.
La aurora boreal suele presentarse cerca del Ártico, pero los vientos solares y las turbulencias magnéticas están provocando su visibilidad en todo Estados Unidos.
Cuando el Sol emite una eyección de masa coronal (EMC) desde una mancha solar, las partículas salen disparadas. Cuando la ruta de los protones y electrones liberados coincide con la órbita de un planeta, ocurre una tormenta solar. Gracias al campo magnético de la Tierra, el viento solar no causa estragos mayores.
De momento solo hay confirmación de auroras boreales en Norteamérica para e 24 de julio, aunque hay posibilidades de que se visualicen en otros países también.
¿Cómo fotografiar una aurora boreal?
Los avistamientos boreales deben cazarse al igual que otros fenómenos astronómicos, como una lluvia de estrellas. Los interesados deben alejarse de la contaminación lumínica propia de las ciudades. Como las luces del norte son un fenómeno que abarca todo el cielo, lo mejor es que las fotografías sean fijas, con ayuda de un trípode. También se debe optar por usar objetivos de gran apertura y aumentar el tiempo de exposición hasta en 25 segundos. Finalmente se debe tener paciencia. Las auroras boreales en lugares inusuales son apenas perceptibles a simple vista. Un leve resplandor en el cielo es lo que las delatará.