La Tierra acaba de experimentar el día más cálido de su historia. Los datos preliminares del Servicio de Cambio Climático Copernicus (C3S) indican que la temperatura media diaria global alcanzó los 17.09°C el pasado 21 de julio. El indicador es ligeramente superior al récord anterior de 17.08°C, establecido el 6 de julio de 2023.
Los científicos afirman que el planeta se ha calentado de forma insospechada durante la última década. Carlo Buontempo, director del C3S, explica que “lo que es realmente asombroso es la gran diferencia que hay entre la temperatura de los últimos 13 meses y los años anteriores”.
La investigación encontró que las temperaturas registradas en el hemisferio norte durante el verano pasado reportaron estar 2.07°C por encima del promedio documentado en la era preindustrial.
El informe del servicio climatológico añade que desde el séptimo mes del año pasado se han registrado 57 días con temperaturas superiores a dicho registro. Señala que los 10 años más calurosos acreditados hasta el momento corresponden al periodo de 2015 a 2024. “Ahora nos encontramos en un territorio verdaderamente desconocido. A medida que el clima siga calentándose es probable que veamos nuevos máximos en los próximos meses y años”, advirtió Buontempo.
El reporte sugiere que el fenómeno está estrechamente relacionado con el calentamiento de la Antártida y la reducida extensión de hielo marino. Ambos factores provocan temperaturas superiores al promedio en el océano Austral. La Organización Meteorológica Mundial (OMM) calcula que más del 90% de los mares a nivel mundial experimentaron olas de calor en algún momento del año pasado. Los efectos fueron especialmente visibles en el conjunto global de glaciares de referencia. El grupo padeció la mayor pérdida de hielo nunca antes certificada desde 1950. “Anomalías de este tipo contribuyeron a las temperaturas globales récord de principios de julio de 2023”, apunta el C3S.
¿2024 será el año más caluroso de la historia?
El año pasado fue el más cálido del que se tiene registro. La OMM ha dicho que existe un 86% de probabilidades de que se establezca un nuevo récord de calor entre 2024 y 2028. El organismo de la Organización de las Naciones Unidas prevé que la superficie terrestre se calentará entre 1.1 y 1.9°C respecto a la era preindustrial.
El C3S afirma que la calificación del clima para este año dependerá en gran medida de cuándo y con qué intensidad se desarrolle el fenómeno de La Niña. Sostiene que 2024 ha sido lo suficientemente cálido para establecer un nuevo umbral anual. No obstante, reconoce que el calor excepcional experimentado durante el último cuatrimestre de 2023 hace que sea demasiado pronto para predecir con exactitud la diferencia. “Como la temperatura media global máxima anual suele producirse entre finales de junio y principios de agosto, estas conclusiones son preliminares”, aclara.
Las medidas tomadas hasta el momento para frenar el avance del calentamiento global son insuficientes, según los expertos. El cumplimiento de los límites contemplados en el Acuerdo de París está en duda. Los líderes mundiales se comprometieron en el convenio internacional a establecer políticas y programas de acción para mantener el aumento de la temperatura promedio mundial por debajo de 1.5°C. Desde que se adoptó el tratado se han incrementado las probabilidades de superar el margen. En 2015, el indicador era cercano a cero. Entre 2017 y 2021 se elevó a 20%, y alcanzó un 66% en las proyecciones anuales para el periodo 2023-2027.
La Organización de las Naciones Unidas sentencia que “los 1.5°C no son una meta. Tampoco son un objetivo. Son un límite físico. Los niveles actuales de calentamiento global ya están produciendo efectos devastadores sobre el clima, como las olas de calor, precipitaciones y sequías más extremas. La reducción de las capas de hielo y de los glaciares, la aceleración de la subida del nivel del mar y el calentamiento de los océanos, son fenómenos que deben preocuparnos”.