‘First Dates’ suele dejarnos momentos de lo más peculiares y extraños, al menos en ciertas ocasiones. Aunque el objetivo del programa es que los participantes encuentren el amor, no siempre se cumple.
El programa está presentado por Carlos Sobera. Se estrenó en 2016, y tanto ha sido su éxito que ha sido proclamado como un programa de referencia de Cuatro. Los espectadores pueden disfrutarlo de lunes a viernes a las 21:05 horas.
‘First Dates’ junta a parejas en una cita a ciegas. Estos participantes mantendrán una conversación durante una cena en la que se conocerán y verán si realmente son compatibles o no. Al final del encuentro, decidirán si han tenido gustos afines y quieren seguir conociéndose, o si, por lo contrario, prefieren no saber nada el uno del otro.
El programa de hoy ha juntado a Cristina, una mujer de 52 años que además es abuela y está totalmente orgullosa de ello. Actualmente tiene una persona con quien tiene sexo esporádico “y es salvaje pero solo es eso”. Para su cita de hoy tiene requisitos imprescindibles: “Feo o guapo me da igual, imprescindible que fume y follador”.
Al entrar su cita lo primero que ha dicho ha sido: “Ay dios, qué lastima, quería un machote”, ha dicho. “Un machote que te coja y te haga zas, donde está”, ha confesado ante cámaras.
Pero a Enrique, Cristina tampoco le ha encantado: “No es el tipo de chica que yo me fijaría por ahí”, ha confesado. Durante la cena Cristina le ha preguntado que hace en sus ratos libres para divertirse pero la respuesta no ha sido la esperada: “Estoy preparando una oposición”, ha dicho.
Cristina lo tenía claro desde el principio: “No es mi tipo, a mi me gustan malotes no lo puedo remediar”. La conversación no ha mejorado cuando Enrique le ha confesado que lleva 5 años con las oposiciones: “Este señor es de pueblo, no se saca la oposición porque es ‘cerrao de mollera’ como dicen en mi pueblo”, ha soltado ante cámaras.
Cuando han hablado de relaciones pasadas Cristina le ha contado que estuvo casada durante mucho tiempo pero su marido falleció. Después de él tuvo otra relación de ocho años y posteriormente estuvo de amante con un hombre que le dejó embelesada, y después de él ya no ha vuelto a tener una relación.
En el momento de la decisión final, ambos lo han tenido claro: no querían una segunda cita.