El chiquito cayó a una pileta y, lastimosamente, falleció ahogado. (Foto: Ilustración)
Fue una mañana más como tantas otras. Nada parecía fuera de lugar. Se levantaron todos, se vistieron, prepararon al “mimado” de la casa para llevarlo a la guardería y, cuando lo dejaron, un fuerte abrazo marcó lo que sería, sin saberlo, el último adiós. Algunos minutos después, el chiquito terminaría ahogado en una pileta.
Desde el Ministerio Público accedieron a las imágenes del circuito de cerrado que tiene instalada la guardería con el fin de determinar cómo se sucedieron los hechos.
Pamela Pérez, presidenta de Asociación de Jardines Infantiles Privados, mencionó a la 780 AM que “es ilógico pensar que un sitio donde se reciben niños desde los cuatro meses en adelante , tenga una piscina, pues los niños no pueden dimensionar el peligro”.
Se sabe que no tenía toda la documentación en regla con respecto al Ministerio de Eduación y la Municipalidad de Asunción también tomó intervención en relación al caso.