A Jon Sanz (Pamplona, 2000) le bautizaron hace un par de años como el DJ del circuito mundial de pádel. Su celebración pinchando discos se hizo famosa y él celebra que a la gente le guste. Tiene mucho carisma. El gesto lo empezó a hacer junto a Miguel Lamperti con quien compartió proyecto durante unos meses. “Me ayudó mucho y es muy importante para mí”, reconoce. Seguramente, de él habrá cogido parte del carisma que reluce. El domingo pasado, en el P2 de Burdeos, Jon Sanz sacó los platos a relucir. Junto al madrileño Coki Nieto, ganó su primer título de la temporada. Unas horas antes de empezar a rodar en el Major de Roma que disputa esta semana, atiende al diario Sport.
¿Cómo estás? ¿Has podido disfrutar del título durante estos días?
Muy contento. Ha sido una alegría inmensa poder ganar en Burdeos. La verdad, es que están siendo días bonitos.
Cada vez cuesta más ganar un torneo. ¿Se valoran más los días como el del domingo pasado?
A día de hoy, ganar un torneo es algo muy complicado. Lo comentamos entre los jugadores. Tienes que ganar muchos partidos, tienes que ser muy constante y sacar adelante partidos en los que estás más allá que aquí. Y, al final, faltaban las cuatro primeras parejas que son las que dominan el cotarro, pero ha sido un torneo disputadísimo. Las parejas que estaban eran muy duras pero había una posibilidad y se tenía que aprovechar.
¿Hay que saber gestionar que no se puede ganar un título pero que ganar hasta cuartos o semis también puede llegar a ser un buen resultado?
Totalmente. Nuestro psicólogo -Óscar- está haciendo una labor impresionante y nos insiste en valorar lo que hemos logrado. Es para estar muy contentos. Y no siempre tendremos torneos como el de Burdeos. Hay que saber valorarlo.
¿A qué sabe?
Sabe a trampolín. Yo me lo tomo así; un trampolín para coger una buena dinámica y aprovechar para hacer buenos resultados antes del verano. Y también de entrenar con más ganas de mejorar.
¿Confirma la hoja de ruta que os marcasteis al principio de la temporada?
Nuestra forma de jugar la hemos mantenido bastante y es muy definida. Es verdad, que hay días que puedes defenderla más y otros que no juegas como te gustaría. Habíamos empezado bien el año pero quizás nos faltaba un pequeño empujón y este título seguro que va a serlo.
¿En qué piensas en el momento en el que te tiras al suelo?
Me pasaron por la cabeza muchas cosas. En lo que más he pensado es en la cantidad de esfuerzos que hacemos cada día. Entrenamientos constantes. Estando bien y mal. Tienes momentos malos y buenos. Y pensé mucho en Maxi Grabiel. Es el que está con nosotros siempre. Con el que quedamos una hora antes de los entrenos para contarle cómo estamos. Maxi es el que mantiene a la pareja viva.
Y después… ¿Qué os decís con Coki y con Maxi?¿Cómo fue la conversación en el vestuario?
Fue todo bastante risas. Y nos dijimos que fue una locura. Por qué el viernes casi que estábamos fuera y dos días después ganamos el torneo. Y se rieron un poco de mi porqué decían que había jugado fatal todo el torneo y en la final jugué muy bien. Y, la verdad, es que estoy totalmente de acuerdo con ellos. En la final, por una cosa o otro, tenía muchas ganas de ganar este título y saqué mi mejor nivel.
¿Por qué crees que pasó?
Tenía una ambición que nunca había tenido. Nunca la había sentido así. Lo veía todo un poco complicado, había tenido momentos no demasiado buenos durante el torneo…pero salí a ganar. Lo quería mucho. Me salió un primer set casi perfecto. Estaba muy conectado. Eso me ayudó. A veces, las cosas salen así. Estoy muy feliz de haber podido ayudar con mi buen nivel.
¿Hay algo que se nos escape a los periodistas? ¿Algo que te hiciera sacar este buen nivel y tener esta motivación encima?
Cada persona es como es y afronta las cosas de manera diferente. Yo tenía muchos sentimientos en esa final. Venía mucha gente de Pamplona a verme. Amigos, familia… gente que casi nunca me ha visto jugar una final. La charla del equipo antes de la final junto a Maxi y Coki, lo que nos dijimos… todo eso ayudó. Fue una final muy sentimental y me encontré muy bien desde el inicio.
¿Pudiste celebrarlo? ¿Hiciste algo especial con el equipo? No se gana cada día.
Mira… Maxi tenía el avión de Burdeos a Madrid por la noche del domingo. No pudo estar. Y se quedaron un amigo mío de Pamplona y mi primer entrenador, Ignacio Santos, que es muy especial en mi vida. Ha estado ayudándome desde los siete años y le estoy muy agradecido. Nos fuimos a cenar y tomamos un tiramisú espectacular. Brindamos con tiramisú. Fue una buena cena de celebración.
No te vimos celebrar demasiadas veces con ese gesto que hizo fortuna emulando los movimientos de un DJ. ¿De dónde salió?
De mi etapa con Lamperti. Miguel me pedía que acelerara la transición desde la defensa al ataque. Que corriera mucho. Y me lo hacía con el dedo. Con un gesto que se me quedó grabado. En un torneo, lo hice y me apodaron así. Es como una especie de marketing que me acompaña.
No jugasteis en el torneo de Asunción, en Paraguay, y os enganchasteis a la gira sudamericana de Premier Padel en Argentina. ¿Necesitábais parar?
Después del torneo Sevilla, Coki tuvo unos problemillas físicos. Unos dolores. Nada grave. Y Maxi aprovechó para trabajar puntualmente cosas conmigo dentro de la pista. Nos fue bien a los dos y así lo decidimos.
¿En qué incide Maxi Grabiel?¿Por qué es tan importante?
Bueno.. Maxi trabaja mucho en la pista y nos ayuda mucho en temas técnicos y tácticos, Esto está claro. Pero, nos ayuda mucho también en cosas que no son técnicas o tácticas. Tanto Coki como yo somos muy temperamentales y en ese aspecto trabaja mucho también. Que nosotros estemos bien entre nosotros porqué así es como trabajamos mejor. Se ha demostrado.
¿En qué punto estáis del proyecto?
En un punto ascendente. Totalmente. En Chile nos quedamos con un sabor muy feo de boca. Nos eliminaron Bela y Tello con un 7-6 en el tercero. Sevilla tampoco acabó con buen sabor de boca. Ganar el torneo de Burdeos de la semana pasada nos tiene que ayudar a ir mejorando. A hacer buenos resultados y sentirnos mejor en los próximos torneos que vamos a disfrutar.
Por ejemplo, en Roma. El Foro Itálico, la ciudad, Italia… ¿Es de los torneos más especiales del año?
Cada uno lo ve diferente. Yo intento centrarme en lo que pasa dentro de la pista y en lo que puedo controlar. Es verdad que es un sitio bonito pero intento ver poco el escenario. Este torneo es importante porqué es un Major y queremos hacer un buen papel más allá de que sea Roma y el Foro Itálico. Y va a costar mucho porqué hemos tenido poco descanso y porqué tenemos un cuadro muy complicado. Pero ya te digo… intento no mirar demasiado el escenario.