Ciudad de México ha decidido clasificar como reservados por tres años los documentos que contienen los resultados de las pruebas de laboratorio realizadas al agua contaminada en la alcaldía Benito Juárez. La decisión del Comité de Transparencia del Sistema de Aguas de la capital le dijo a Animal Político que la divulgación de esta información pueda dar lugar a “interpretaciones erróneas”.
En respuesta a una solicitud de información, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México indicó que los documentos sobre el agua contaminada están reservados por hasta cinco años. “De publicarse se puede vulnerar la conducción de la investigación; es decir se trata de datos relacionados con los argumentos hechos valer en la denuncia correspondiente y con ello, se declare el ejercicio de la acción penal”, se lee en la respuesta del Sistema de Aguas.
“Al estar la información expuesta al escrutinio del público es susceptible de generar interpretaciones erróneas, confusas y equívocas; causando con ello un serio perjuicio a las actividades de investigación en cumplimiento de las leyes, prevención o persecusión de los delitos o conductas antijurídicas, así como de la impartición de justicia”.
La decisión de clasificar la información se aprobó por mayoría el 29 de abril, con la abstención de la representante del Órgano Interno de Control del Sistema. La solicitud de transparencia, presentada el 19 de abril por Animal Político recibió inicialmente una solicitud de prórroga por parte de SACMEX debido a la “complejidad” de buscar en sus extensos archivos.
No fue hasta el 8 de mayo que SACMEX respondió, indicando que la información sería clasificada, incluyendo los detalles de los domicilios identificados como afectados por el problema del agua.
El Sistema asegura que el agua potable actualmente distribuida cumple con los parámetros normativos para su uso diario.
Ante la falta de respuestas oficiales, grupos de vecinos organizaron análisis independientes del agua de sus hogares mediante laboratorios certificados. Los análisis revelaron que el agua de varias colonias afectadas contiene cloroformo, diclorobenceno, tricloroetileno y otras sustancias nocivas.
Por otra parte, la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) ha identificado derivados de petróleo en muestras de agua contaminada provenientes de la alcaldía Benito Juárez. Delia Montero, especialista y coordinadora de la red de agua de la UAM informó que se tomaron dos muestras del agua de la red pública en un inmueble donde previamente se había vaciado y lavado la cisterna. “En las primeras pruebas realizadas tanto a las cisternas como a la red pública, se detectaron residuos orgánicos, principalmente derivados del petróleo”, afirmó Delia Montero.
La investigadora destacó que aún se desconocen las concentraciones específicas de los residuos detectados en el agua. “Es preocupante porque algunos vecinos estaban a punto de reactivar su suministro tras limpiar las cisternas”. Como respuesta, los vecinos han decidido llevar el problema de la contaminación ante los tribunales.
El Gobierno de la Ciudad de México tardó una semana en reconocer oficialmente el problema y el 8 de abril anunció que la contaminación estaba relacionada con sustancias pertenecientes a la familia de los aceites y lubricantes. Martí Batres, confirmó el lunes que existe contaminación en el agua de la delegación Benito Juárez. “La sustancia a la que se refieren los reportes pertenece a la familia de los aceites y los lubricantes”, dijo Batres. ”Hasta ahí van los análisis que se van a seguir desarrollando, y también seguimos con las indagatorias para identificar de dónde proviene el punto preciso de contaminación”, explicó.
El 9 de abril, Protección Civil, Pemex, el Ejército y la Guardia Nacional realizaron un operativo para resguardar el pozo Alfonso XIII, en la alcaldía Álvaro Obregón. En el pozo se ha detectado un olor muy fuerte, como el que refieren los vecinos de la zona norponiente de Benito Juárez. Las autoridades aseguran que este pozo puede ser la causa del agua contaminada, que afecta a varias colonias. El pozo está cerrado, la zona se encuentra acordonada y la investigación ha descartado que sea un problema de huachicol, o gasolina robada. La académica de la UAM le preocupa que la contaminación se encuentre en aguas profundas, que pueda afectar al agua del resto de la ciudad.